El aceite de oliva virgen extra es nuestro alimento favorito a la hora de alimentarnos y nutrir nuestro cuerpo. Sin embargo, hay un sistema de puntuación de alimentos que no lo tiene tan claro: el sistema Nutri-Score.
A pesar de las más que comprobadas propiedades y beneficios del aceite de oliva virgen extra, aún siguen existiendo reticencias en cuanto a su consumo. ¡Te lo contamos todo sobre este sistema de puntuación de alimentos!
Nutri-Score es una herramienta de etiquetado que recoge de forma gráfica la información nutricional de un producto, a través de letras y colores. Hay cinco variantes del logo Nutri-Score que marcan la calidad nutricional global de los alimentos: letra A y color verde para la mayor calidad y letra E y color naranja fuerte para la peor calidad. Por lo cual, un producto con una A o una B es un alimento saludable, mientras que una D o una E nos deben poner alerta.
De esta forma visual, el sistema Nutri-Score ayuda a interpretar fácilmente la información nutricional de un producto alimenticio para comparar la calidad nutricional de alimentos. El objetivo es ayudar a elegir opciones más saludables para conseguir una alimentación variada, equilibrada y de calidad nutricional.
Este sistema de puntuación tiene en cuenta los componentes de cada alimento. De esta forma, puntúa de mejor manera las frutas y hortalizas, aceite de oliva, colza o nuez y aquellos alimentos ricos en proteínas y fibra. Los componentes cuyo consumo debe limitarse, según Nutri-Score, son las grasas saturadas, los azúcares, la sal y energía.
A pesar de los múltiples beneficios nutricionales que ofrece el aceite de oliva, el sistema Nutri-Score lo clasifica en la categoría “C”, con un color amarillo. Incluso, ha llegado a estar catalogado con la letra “D”, de color naranja e indicando que no es un producto tan saludable.
Este mensaje supone una alerta en cuanto al consumo de aceite de oliva. El color amarillo está indicando que no es uno de los mejores aceites y que debemos limitar su consumo, cuando lo cierto es que el aceite de oliva virgen extra está considerado como la mejor grasa y la que debe estar como base en cualquier dieta equilibrada y saludable.
La polémica está servida puesto que, además de situar al aceite de oliva virgen extra a la misma altura que el aceite de colza o el de nuez, el sistema Nutri-Score ofrecía una mejor puntuación a productos ultraprocesados.
Aunque el sistema Nutri-Score tiene como objetivo proporcionar una orientación sencilla sobre la calidad nutricional de los alimentos, tiene ciertas limitaciones que pueden afectar su precisión, en este caso, en el aceite de oliva. El sistema se basa en el contenido de nutrientes por 100 gramos de producto, lo que puede no ser representativo de las cantidades reales que se consumen en una dieta típica. Además, el Nutri-Score no tiene en cuenta la presencia de nutrientes esenciales o beneficiosos para la salud, como los ácidos grasos monoinsaturados del aceite de oliva.
¿Quieres aprender más sobre la composición del aceite de oliva? Puede que te interese:
El aceite de oliva es el oro del mediterráneo, la grasa saludable por excelencia y la base de la Dieta Mediterránea. Sin duda, es un superalimento que no debe faltar en nuestra alimentación, independientemente de la puntuación que adquiere en el sistema Nutri-Score.
Rico en ácidos grasos monoinsaturados, antioxidantes y vitamina E, el aceite de oliva es el mejor aliado a la hora de cuidar nuestra salud cardiovascular. Protege nuestro corazón regulando el colesterol en sangre, de forma que reduce las posibilidades de padecer alguna enfermedad cardiovascular. Además, es una fuente de energía y vitaminas liposolubles, como la vitamina K.
Gracias a su composición en antioxidantes, el aceite de oliva virgen extra puede ayudar a prevenir enfermedades neurodegenerativas, como el Alzheimer. Incluso, se conocen sus propiedades antiinflamatorias, siendo recomendado su consumo en personas con artrosis o artritis.
Además de todas estas propiedades, el aceite de oliva virgen extra tiene propiedades anticancerígenas, por lo que ayuda a reducir las probabilidades de sufrir algunos tipos de cáncer, como el cáncer de mama, el de colon o el de próstata.
Por ello, aunque debemos de limitar el consumo del aceite de oliva virgen extra a unas cinco cucharadas diarias, ¡no debemos excluirlo de nuestra dieta! Utilízalo para cocinar y para consumirlo en crudo para beneficiarte de todas sus propiedades y gozar de una excelente salud.
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